Entradas

Clairo - Sling

Imagen
“Sling” se abre honesto. Se desliza de una forma tímida, delicada, y sensible. Pero decidida.  Se refleja en este álbum consciente, pero sin saber que hacer realmente de su vida o cómo proseguir. Resistiendo mientras se lame sus propias heridas. No soy fan de su debut, ni tampoco me enganché con sus singles lo-fi que rondaron en internet hace dos años. Tampoco me atraía su voz ni la forma en la que se expresaba a través de su arte, hasta el presente proyecto. Su forma de enfrentar sus debilidades a través de su música me hizo sentir una tranquilidad que no escuchaba hace mucho dentro del indie sobre explotado de hoy en día.  Aquí se presentan trazos de muchos géneros en especifico. La cantidad de instrumentos puestos en escena y la forma en que estos se desarrollan a través de las letras, ponen lo reflejado por Clairo en un estado concentrado a su temática central: crecer. A lo largo de todo el álbum desarrolla los idas y vueltas de una relación tóxica; el ir y venir de dos partes que

Una imagen bien llevada.

Imagen
Ya teniendo IGOR lo bastante fresco como para que nadie esté esperando este álbum lo suficiente, CMIYGL se posa frente a nosotros como un recordatorio de que Tyler ya tiene 11 años dentro de la industria, y que se ha hecho su lugar dentro de la escena mainstream, lo creas o no. Otro alter ego es creado, pero en este caso no es algo tan concreto como nos tenía acostumbrado en Flower Boy o IGOR. Todo el material se concentra y se funde como si fuera un mixtape de bangers, canciones que se pueden sostener tranquilamente por si solas. Lo único que se sostiene conceptualmente es el estilo de producción, el cual cambia constantemente de un bajo ultra saturado, a una batería boom-bap hasta los synth y instrumentación setentera, la cual ha estado explotando desde IGOR, tomando aquí una forma mucho más concentrada y menos estirada, dando la sensación del rayo en la botella. Suena prominente, pero sin rumbo. Siendo un material concentrado en cada canción por separado, dejando de lado el concept

El caos en el tecnicismo.

Imagen
  " Everyone loves ascending fourths " Lo primero que se viene a la mente cuando uno piensa en Black Midi, o simplemente mirando la portada de Cavalcade, es caos. Y en un principio los sencillos como “John L” o “Slow” daban indicios de que el segundo álbum de la banda iba a llegar a ser aún más desordenado y explosivo que su debut, agregando a su paso, géneros e instrumentos para generar aún más disonancia a la mezcla. Hasta el saxofonista de Black Country, New Road está presente aquí. Pero se arriesgaron, y por diversión y amor hacia lo que hacen, tomaron otros aires. Los cortes de “Diamond Stuff”, “Marlene Dietrich” y “Ascending Forth” atacan en silencio. Son momentos extremadamente serenos y de una delicadeza en la ejecución muy característica de bandas que exploran la dimensión sonora a través de orquestas e instrumentaciones atípicas, como Grizzly Bear o Scott Walker. Esto seguramente haya hecho tropezar a más de uno, más que nada aquellos, que son la mayoría, que se eng